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El zorro ha vuelto.
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El zorro ha vuelto.
por Kasai Endō Jue Ago 13, 2015 12:02 am
Nombre: Kasai Endō.
Edad real: 500 años.
Edad aparente: 28 años.
Género: Masculino.
Pokémon: Ninetales.
Orientación sexual: Bisexual.
Altura: 1.85 metros.
❂Apariencia.
A demás de su altura, lo que cabe destacar es el largo de su cabello que llega casi a la altura de sus rodillas; éste a su vez es blanco con una singularidad en particular, ya que posee un par de extensiones simulando orejas. No es algo que el haya hecho, sólo sabe que las ha tenido desde siempre y que por nada del mundo ha podido volverlas parte de su cabello natural.
Es de tez blanca, sus orbes son rojas mientras que sus cejas /a diferencia de su cabello/ tienen un tono castaño y éstas son cortas, ni siquiera están completas por encima del arco del ojo. Su físico es regular, suele ejercitarse bastante pero tampoco es exagerado en su musculatura más está se denota bastante. Le basta con lo que ha logrado hasta ahora. Mayormente viste yukatas, le parecen cómodas por ser la vestimenta tradicional de su país de origen y de cierta forma es bastante desordenado en cuestión de cuidarse; sobre todo si hablamos de su cabello.
Ninetales es un Pokémon en particular ya que su apariencia está basada en un zorro de nueve colas y sería el ejemplo más claro del mismo, si no fuera por su pelaje beige y el tono café en el final de cada una de sus nueve colas. Además posee un mechón de cabello extra sobre la cabeza, que va por completo hacia atrás y su melena delantera que cubre su pecho por completo. Tiene una figura imponente y fuerte, rasgos que lo caracterizan a donde fuera, ya que en está forma puede lucir su esbelta figura y demostrar la fuerza de sus patas.
❂Personalidad.
Su carácter no es el mejor de todos, es alguien que sin importar la persona que tenga enfrente soltara lo primero que se le venga a la cabeza, será difícil que éste cause una buena impresión por los gruñidos constantes que suelta al ver algo que le desagrada o por simples cuestiones suyas en las que tiene a juzgar sin conocer, además de que le gusta causar molestia en los demás. Suele ser muy inoportuno, aunque su honestidad es quizás una de sus más grandes armas como desventajas que tiene, ya que se ha llevado varios regaños por comportarse como una completa bestia sin tener tacto en sus palabras; ha hecho llorar niños, mujeres y hombres por decir lo que piensa de ellos sin no siquiera medirce con lo que habla y para ser francos a él poco le importa si ocasionó las lágrimas de alguien aunque eso depende de quien trate y a quien quiera apreciar.
Para nada es alguien que pueda "comprender" a las personas, sólo se entiende a él mismo y toma una actitud negativa en cuanto le recriminan lo que debe o no debe hacer; se cree el dueño de todo lo que le gusta, en su mundo nadie tiene derecho a pedirle un cambio de actitud.
Cuando se embriaga es alguien insoportable; puede llegar a ser vulgar, ofensivo y todo un viejo verde si la oportunidad se presenta, lo peor de todo el caso es que a diferencia de muchos el sí recuerda lo que hizo con mucha claridad y pese a que pudo haber hecho miles de cosas que no eran debidas, no se arrepiente en absoluto.
Respecto al romance, no sabe nada y no quiere probarlo por cosas del pasado mas no significa que viva solo como un soltero por siempre, es sólo que no piensa llegar tan rápido a algo como ello.
Ha vivido bastante pero ni siquiera en esos años ha llegado a experimentar las ganas de vivir junto a alguien y lo mucho que puedes apreciar a esta persona como lo hizo alguna vez con su primera pareja. Teme al día en que eso vuelva a suceder porque no sabría ni como reaccionar a tales sensaciones molestas.
❂Historia.
Desde siempre ha vivido en un templo como guardián del mismo, ni siquiera tiene idea de quien es el Dios que vienen a venerar sus seguidores día tras día pero sólo sabe que debe tener mucho trabajo ya que las personas no dejan de pedirle cosas. En parte siente que está en deuda con aquella deidad por tener un templo para que se pudiera refugiar en el mismo hasta que maduró lo posible para ahora estar a cargo del mantenimiento que requiere.
Cuando apenas era un Vulpix se vio en apuros los cuales le hicieron verse obligado a abandonar toda familia que alguna vez tuvo, en lo que corria por su vida lo único que pudo ayudarle fueron las luces de aquel santuario por las que se vio guiado. No esperaba ver a alguna persona, sin embargo conoció a una mujer que enseguida lo adoptó como hijo suyo; ella lo crió, cuidó y le dio toda atención necesaria aunque por obvias razones por más que fuera educado de la manera correcta, jamás a podido ejercer los modales propios de las enseñanzas de su madre adoptiva. Estuvo viviendo encerrado por decisión propia hasta que decidió adentrarse al mundo humano a la edad real de 13 años, como alguien que no conoce más allá de una escalera tuvo una experiencia en particular ya que a esa edad probo la bebida que ahora seria la causante de todos sus problemas de humor; el sake.
Cosas así lo volvieron más agresivo, inclusive rebelde con la autoridad mayor en su hogar pero no era que también tuviera control sobre sí, las cosas siempre las ha hecho sin pensar el tiempo necesario. Desde cosas así, ha sido capaz de salir de su hogar para caminar unicamente con el dinero suficiente para gastarlo en bares de mala muerte, sólo para pasar un rato aunque casa que pasa por esas calles nota cambios en la civilización; cada década o centena piensa que todo da un giro muy drástico, pero por ello prefiere la vida como la conoció primero y he de ahí su gusto por vestir trajes tradicionales.
A sus 25 años conoció a una chica humilde, castaña y creyente de la deidad del templo en el que vive de la cual se enamoró. Su nombre era Hana Endō; una mujer como cualquier otra sin embargo no cualquiera le hacia sentir en paz como ella con sus palabras, caricias y risas. No supo como ni cuando pero las cosas entre los dos sólo se dieron por lo que su lado más amable floreció estando con ella al igual que una parte que le pedia proteger aquello que amaba; en su vida se había sentido tan en paz con la vida. Estuvieron juntos hasta el día en que ella murió como era de esperarse, aún y cuando sabia que algo así ocurriría vivió con el pesar por unos 3 años en los que aprendió que ella no era nada más que un recuerdo memorable que nunca podria sacar de su pecho. Después de eso intentó volver a enamorarse pero sólo obtuvo una relación informal con una chica de su especie aunque diferecian en el tipo que eran. Por más que quiso hacer que funcionara, de todos modos no podia esforzarse tanto porque terminó por darse cuenta que no era la clase de amor que esperaba; terminaron, según él, en buenos terminos ya que la ve como una especie de hermana aún y cuando compartieron días como cualquier pareja.
Por el momento su historia es monótona pues su único trabajo como agradecimiento a ese lugar ha sido cuidarlo, manteniéndolo tal y como estuvo desde que lo conoce. Su vida ha sido bastante solitaria lo cual explica muchas cosas en base a su comportamiento, sin embargo no significa que sea malo todo el tiempo, sólo se trata de su falta de confianza.
❂Movimientos y habilidad.
—Sequía.
—Lanzallamas.
—Fuego fatuo.
—Divide dolor.
—Rugido.
♡Gustos.
—El alcohol.
—Fumar en pipa japonesa.
—El arte de la espada.
—Los arboles de sakura en temporada.
—Aguas termales.
—Molestar perros.
—También gatos.
—Su forma original.
✘Disgustos.
—Aidan.
—La tecnología.
—Las personas tímidas.
—Lo ambiguo.
—El orden en exceso.
—Los humanos.
—El control sobre su libertad.
▶Headcanon◀
—Puede decirse que no es bueno controlando su humor, hay momentos en los que de la nada se sobresalta o puede llegar a deprimirse por completo.
—Gusta del té sólo si es rojo y sobre todo servido en una taza de porcelana fina.
—Le preocupa el día en que su hermana le diga que tiene una relación con el perro.
—Tiene cierto respeto por la imagen de Lucario ya que no siempre puede verse tanta seguridad en una persona, sobre todo si es como aquel ser.
—No es coqueto y llega a halagar por ser simple verdad.
—Le gustan las Geishas.
—No soporta a las mujeres débiles pero le fascina ver a una con determinación y de palabras fuertes.
—En cuanto a hombres, le fastidia líder con aquellos que hablan más de lo que pueden dar.
—Detesta ver hombres afeminados, es raro que uno pueda llegar a captar su atención. En ese caso, es porque lo vio demasiado sensual.
Edad real: 500 años.
Edad aparente: 28 años.
Género: Masculino.
Pokémon: Ninetales.
Orientación sexual: Bisexual.
Altura: 1.85 metros.
❂Apariencia.
A demás de su altura, lo que cabe destacar es el largo de su cabello que llega casi a la altura de sus rodillas; éste a su vez es blanco con una singularidad en particular, ya que posee un par de extensiones simulando orejas. No es algo que el haya hecho, sólo sabe que las ha tenido desde siempre y que por nada del mundo ha podido volverlas parte de su cabello natural.
Es de tez blanca, sus orbes son rojas mientras que sus cejas /a diferencia de su cabello/ tienen un tono castaño y éstas son cortas, ni siquiera están completas por encima del arco del ojo. Su físico es regular, suele ejercitarse bastante pero tampoco es exagerado en su musculatura más está se denota bastante. Le basta con lo que ha logrado hasta ahora. Mayormente viste yukatas, le parecen cómodas por ser la vestimenta tradicional de su país de origen y de cierta forma es bastante desordenado en cuestión de cuidarse; sobre todo si hablamos de su cabello.
Ninetales es un Pokémon en particular ya que su apariencia está basada en un zorro de nueve colas y sería el ejemplo más claro del mismo, si no fuera por su pelaje beige y el tono café en el final de cada una de sus nueve colas. Además posee un mechón de cabello extra sobre la cabeza, que va por completo hacia atrás y su melena delantera que cubre su pecho por completo. Tiene una figura imponente y fuerte, rasgos que lo caracterizan a donde fuera, ya que en está forma puede lucir su esbelta figura y demostrar la fuerza de sus patas.
❂Personalidad.
Su carácter no es el mejor de todos, es alguien que sin importar la persona que tenga enfrente soltara lo primero que se le venga a la cabeza, será difícil que éste cause una buena impresión por los gruñidos constantes que suelta al ver algo que le desagrada o por simples cuestiones suyas en las que tiene a juzgar sin conocer, además de que le gusta causar molestia en los demás. Suele ser muy inoportuno, aunque su honestidad es quizás una de sus más grandes armas como desventajas que tiene, ya que se ha llevado varios regaños por comportarse como una completa bestia sin tener tacto en sus palabras; ha hecho llorar niños, mujeres y hombres por decir lo que piensa de ellos sin no siquiera medirce con lo que habla y para ser francos a él poco le importa si ocasionó las lágrimas de alguien aunque eso depende de quien trate y a quien quiera apreciar.
Para nada es alguien que pueda "comprender" a las personas, sólo se entiende a él mismo y toma una actitud negativa en cuanto le recriminan lo que debe o no debe hacer; se cree el dueño de todo lo que le gusta, en su mundo nadie tiene derecho a pedirle un cambio de actitud.
Cuando se embriaga es alguien insoportable; puede llegar a ser vulgar, ofensivo y todo un viejo verde si la oportunidad se presenta, lo peor de todo el caso es que a diferencia de muchos el sí recuerda lo que hizo con mucha claridad y pese a que pudo haber hecho miles de cosas que no eran debidas, no se arrepiente en absoluto.
Respecto al romance, no sabe nada y no quiere probarlo por cosas del pasado mas no significa que viva solo como un soltero por siempre, es sólo que no piensa llegar tan rápido a algo como ello.
Ha vivido bastante pero ni siquiera en esos años ha llegado a experimentar las ganas de vivir junto a alguien y lo mucho que puedes apreciar a esta persona como lo hizo alguna vez con su primera pareja. Teme al día en que eso vuelva a suceder porque no sabría ni como reaccionar a tales sensaciones molestas.
❂Historia.
Desde siempre ha vivido en un templo como guardián del mismo, ni siquiera tiene idea de quien es el Dios que vienen a venerar sus seguidores día tras día pero sólo sabe que debe tener mucho trabajo ya que las personas no dejan de pedirle cosas. En parte siente que está en deuda con aquella deidad por tener un templo para que se pudiera refugiar en el mismo hasta que maduró lo posible para ahora estar a cargo del mantenimiento que requiere.
Cuando apenas era un Vulpix se vio en apuros los cuales le hicieron verse obligado a abandonar toda familia que alguna vez tuvo, en lo que corria por su vida lo único que pudo ayudarle fueron las luces de aquel santuario por las que se vio guiado. No esperaba ver a alguna persona, sin embargo conoció a una mujer que enseguida lo adoptó como hijo suyo; ella lo crió, cuidó y le dio toda atención necesaria aunque por obvias razones por más que fuera educado de la manera correcta, jamás a podido ejercer los modales propios de las enseñanzas de su madre adoptiva. Estuvo viviendo encerrado por decisión propia hasta que decidió adentrarse al mundo humano a la edad real de 13 años, como alguien que no conoce más allá de una escalera tuvo una experiencia en particular ya que a esa edad probo la bebida que ahora seria la causante de todos sus problemas de humor; el sake.
Cosas así lo volvieron más agresivo, inclusive rebelde con la autoridad mayor en su hogar pero no era que también tuviera control sobre sí, las cosas siempre las ha hecho sin pensar el tiempo necesario. Desde cosas así, ha sido capaz de salir de su hogar para caminar unicamente con el dinero suficiente para gastarlo en bares de mala muerte, sólo para pasar un rato aunque casa que pasa por esas calles nota cambios en la civilización; cada década o centena piensa que todo da un giro muy drástico, pero por ello prefiere la vida como la conoció primero y he de ahí su gusto por vestir trajes tradicionales.
A sus 25 años conoció a una chica humilde, castaña y creyente de la deidad del templo en el que vive de la cual se enamoró. Su nombre era Hana Endō; una mujer como cualquier otra sin embargo no cualquiera le hacia sentir en paz como ella con sus palabras, caricias y risas. No supo como ni cuando pero las cosas entre los dos sólo se dieron por lo que su lado más amable floreció estando con ella al igual que una parte que le pedia proteger aquello que amaba; en su vida se había sentido tan en paz con la vida. Estuvieron juntos hasta el día en que ella murió como era de esperarse, aún y cuando sabia que algo así ocurriría vivió con el pesar por unos 3 años en los que aprendió que ella no era nada más que un recuerdo memorable que nunca podria sacar de su pecho. Después de eso intentó volver a enamorarse pero sólo obtuvo una relación informal con una chica de su especie aunque diferecian en el tipo que eran. Por más que quiso hacer que funcionara, de todos modos no podia esforzarse tanto porque terminó por darse cuenta que no era la clase de amor que esperaba; terminaron, según él, en buenos terminos ya que la ve como una especie de hermana aún y cuando compartieron días como cualquier pareja.
Por el momento su historia es monótona pues su único trabajo como agradecimiento a ese lugar ha sido cuidarlo, manteniéndolo tal y como estuvo desde que lo conoce. Su vida ha sido bastante solitaria lo cual explica muchas cosas en base a su comportamiento, sin embargo no significa que sea malo todo el tiempo, sólo se trata de su falta de confianza.
❂Movimientos y habilidad.
—Sequía.
—Lanzallamas.
—Fuego fatuo.
—Divide dolor.
—Rugido.
♡Gustos.
—El alcohol.
—Fumar en pipa japonesa.
—El arte de la espada.
—Los arboles de sakura en temporada.
—Aguas termales.
—Molestar perros.
—También gatos.
—Su forma original.
✘Disgustos.
—Aidan.
—La tecnología.
—Las personas tímidas.
—Lo ambiguo.
—El orden en exceso.
—Los humanos.
—El control sobre su libertad.
▶Headcanon◀
—Puede decirse que no es bueno controlando su humor, hay momentos en los que de la nada se sobresalta o puede llegar a deprimirse por completo.
—Gusta del té sólo si es rojo y sobre todo servido en una taza de porcelana fina.
—Le preocupa el día en que su hermana le diga que tiene una relación con el perro.
—Tiene cierto respeto por la imagen de Lucario ya que no siempre puede verse tanta seguridad en una persona, sobre todo si es como aquel ser.
—No es coqueto y llega a halagar por ser simple verdad.
—Le gustan las Geishas.
—No soporta a las mujeres débiles pero le fascina ver a una con determinación y de palabras fuertes.
—En cuanto a hombres, le fastidia líder con aquellos que hablan más de lo que pueden dar.
—Detesta ver hombres afeminados, es raro que uno pueda llegar a captar su atención. En ese caso, es porque lo vio demasiado sensual.
Kasai Endō
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Re: El zorro ha vuelto.
por Lazuli Articuno Jue Ago 13, 2015 12:03 am
Aceptada y cerrada, pongase bien el avatar.(?)
Lazuli Articuno
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10/08/2015
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